Decía mi madre, doña Carmen, que nací un lunes por la noche, mientras caía una tormenta, clásica tormenta de verano en el inicio del mes de agosto allá en Tierra Blanca, Veracruz, La Puerta del Papaloapan.

De Tierra Blanca vienen tres de mis grandes pasiones: el gusto por la buena cocina y lo valioso de la convivencia humana, que aprendí de mi madre; la honestidad y la visión amplia para entender el mundo en el que vivía, que aprendí de doña Lupe, mi abuela.

Y hay una tercera: cuando tenía cuatro años de edad llegó a mi tierra doña Lupe León, oriunda de Tlacotalpan y miembro distinguido del Club Veracruzano en la ciudad de México. Era una mujer flaca y alta que tenía setenta años de edad. Doña Lupe llegó a Tierra Blanca a dar clases de zapateado jarocho. Don Severiano, mi padre (que tiene dos pies izquierdos) dijo que tenía que aprender a zapatear y aprendí.

Mientras viví en Tierra Blanca, hasta los doce años de edad, fui el campeón de zapateado. Mis trofeos se encuentran en la Escuela Primaria Ferrocarriles Nacionales, donde estudié. El son jarocho es otra de mis pasiones.

Luego vino la Universidad Veracruzana: Facultad de Medicina junto con Antropología Social, para después abandonar ambas e ingresar a la Facultad de Nutrición, de donde finalmente egresé con grado de Licenciatura.

Ya como nutriólogo trabajé en el Sector Salud de Veracruz a nivel ejecutivo y luego, como Jefe del Servicio de Alimentación de uno de los hospitales del sector, mismo que abandoné para fundar mi restorán, al que llamé La Sopa. Restorán que rápidamente se hace famoso en el paladar de los habitantes de la ciudad.

En el año 2007 fui invitado por Isela y Claudia a realizar un programa de gastronomía que llevaría por nombre Con Sabor Jarocho.

El trabajo con la familia TVMÁS y con un equipo humano maravilloso ha sido una delicia. Hoy, gracias a internet y a nuestra señal, la señal de TVMÁS, llegamos a todos los hogares del mundo con un gusto enorme y, por supuesto, con sabor jarocho.